Prólogo

Somos Charly y Maru, un par de parias bonaerenses que se encontraron en Rosario (Santa Fe) por esos caprichos del destino, y que decidieron desde entonces desandar sus caminos de la mano. Actualmente vivimos juntos en dicha ciudad, y estamos a horas de irnos a caminar los bellos accidentes geográficos andinos en un corto pero maravilloso viaje por Bolivia y Perú. Siempre opino que los viajes comienzan mucho antes de poner un pie en tierra de destino, mas bien éstos comienzan en la idea, en el sueño, en el mapa donde empezamos a imaginarlos con la punta de los dedos.

Como siempre, lo más difícil dentro de la rutina laboral y la vida de bicho de ciudad, es poder ajustar esas pasiones y pulsiones mochileras a las reales posibilidades que la maldita rutina nos presenta. A pesar de ello siempre es posible viajar, después de todo la vida sigue, los empleos pasan pero también la vida pasa, y no podemos permitirnos transcurrir por ella sin ser felices, sin conocer un poco de mundo. Siguiendo esa especie de mantra es que la mochila siempre está cerquita a la cama, como recordándome este principio cada vez que me voy a dormir. Así fue como sin dinero y con poco tiempo de conocernos decidimos delinear este viaje, comenzarlo en el mapa para llevarlo a las mochilas y finalmente a tierra firme. Este viaje ya inició hace varios meses, y no solo nos empujó a los esfuerzos que todo viaje supone en su preparación, sino que sin darnos cuenta nos fue uniendo mucho, más de lo que podíamos percibir.

Como los dos somos miembros activos de Couchsurfing empezamos por ese lado, buscando consejos de colegas viajeros y lugareños, tanto vía web como en cada juntada semanal que organizamos acá en Rosario. La información disponible es abrumadora, por eso el trabajo de filtrado y selección es inherente. Muchas veces el problema radica en que determinados destinos están atravesados por cierto morbo de lo bucólico, de lo místico, de lo mágico, haciendo que se desviertúe su contenido real, social e histórico, esa impunidad que el etnocentrismo impone con frecuencia en el tercer mundo. Una vez superado este escollo (tampoco es tan difícil de filtrar) podemos acercarnos a un itinerario bastante aproximado a lo que deseamos, lo que está a nuestro alcance y lo que queremos ver.

Nuestro itinerario a priori es el siguiente:

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Comenzamos desde La paz, ala cual llegamos desde Santa Cruz de la Sierra por avión.

Sí, lo sé, no es nada diferente ni exclusivamente original que no podamos observar en cualquier otro itinerario, es casi «de manual» podríamos afirmar. La diferencia debe agregársela uno mismo, no siendo un turista, sino un viajero, un caminante. Eso es lo más complejo, evitar caer en ciertos clichés que nos alejan de una experiencia más enriquecedora, además de generar en algunas ocasiones  ciertas reticencias en los lugareños al querer acercarnos a su hospitalidad.

Comprender o dar sentido a todo eso puede llevar un tiempo,  pero una vez logrado ya estamos listos para disfrutar al máximo de la forma de vida que es viajar. Lleva un tiempo pero pocas cosas son tan lindas, aunque mañosas, como armar las mochilas. Esto es básicamente prueba y error,  cargar de más hasta darnos cuenta lo que cada prenda inútil termina pesando en nuestros hombros, o por el contrario tener poca y mal adecuada vestimenta y pasar frío,  por ejemplo. Así uno aprende a ser más eficaz,  pero sobre todo más eficiente. En mi caso la regla es que lo que uso en una semana, me rinde tres. La ropa se lava, se arman mudas, se recicla tal o cual prenda y se va ganando experiencia en esa pequeña pero hermosa casa rodante que resulta ser tu mochila. Básicamente no existe lugar para las cosas que «tal vez» pueda usar, cada «tal vez» puede costarnos peso excedente y eso redunda en menos ganas de caminar, y eso es un pecado del cual podemos prescindir siendo un poco más realistas en el armado de la mochila.

Ahora bien, teniendo un itinerario flexible en mano y unas mochilas equipadas y cómodas ya nada más precisamos, tan sólo lanzarnos a conocer, así que nosotros los invitamos a conocer un poquito a través de nuestros ojos sobre estos lugares que visitaremos, con datos que esperemos sean de utilidad para quienes quieren visitar dichos destinos, por lo que estamos abiertos a consultas, sugerencias pero también a agradecimientos y apoyo 🙂

Buenos caminos y pura vida!!!

Charly & Maru

Un comentario en “Prólogo

  1. Eugenio Gayol dijo:

    Bueno, estuve viendo el Blog y sinceramente entusiasma mucho al lector que tiene intenciones de realizar un viaje similar al que Uds. hicieron.
    Los felicito por la claridad de la la narrativa, las imágenes y la composición de lo que escriben, es una buena obra de la escritura y la narrativa.
    Nos viene bien a los lectores que pretendemos llegar a esos lugares, creo que sera motivo de consulta para ir organizando un viaje. Muchas Gracias

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